
Heridas leves: Lo más recomendable es Protección personal o normas de bioseguridad:
– Guantes quirúrgicos para evitar contagios – Desinfección del material de curas. – Antisepsia de las manos del socorrista. – Limpieza de la herida con agua y jabón, del centro a la periferia.
Si la herida es profunda, utilizar suero fisiológico para su limpieza. No utilizar alcohol, ya que este produce vasodilatación. Utilizar desinfectante en espuma para su desinfección periférica (no en la herida) y precaución en utilizar agua oxigenada porque destruye a los tejidos (necrosis tisular).
– Si la separación de bordes es importante, la herida necesitará sutura por un facultativo, si es el caso, acudir al centro asistencial más cercano. Si no es así, pincelar con un antiséptico y dejar al aire.
Si sangra, colocar un vendaje (gasas sujetas con venda no muy apretada).
– Recomendar la vacunación contra el tétanos siempre y cuando no se la haya aplicado.
– Levantar las piernas para la presión de la sangre. Heridas graves: -Efectuar la evaluación inicial de la víctima.
– Controlar la hemorragia y prevenir la aparición del shock.
– Cubrir la herida con un apósito estéril y procurar el traslado en la posición adecuada, controlando las constantes vitales.
– NO extraer cuerpos extraños enclavados. Fijarlos para evitar que se muevan durante el traslado de la víctima y causen nuevos daños en su interior.
HERIDAS
Una herida es una lesión que se produce en el cuerpo. Puede ser producida por múltiples razones, aunque generalmente es debido a golpes o desgarros en la piel. Dependiendo de su gravedad, es necesaria asistencia médica.
Es toda pérdida de continuidad en la piel (lo que se denomina «solución de continuidad»), secundaria a un traumatismo. Como consecuencia de la agresión de este tejido existe riesgo de infección y posibilidad de lesiones en órganos o tejidos adyacentes: músculos, nervios, vasos sanguíneos.
Las heridas pueden ser graves en función de una o varias de estas características: -Profundidad. – Extensión. – Localización. – Suciedad evidente, cuerpos extraños o signos de infección.
